El esguince de tobillo es una de las lesiones más comunes entre las personas que hacen deporte, aunque también se puede producir en situaciones cotidianas.

El esguince de tobillo se produce, normalmente tras caídas, una vez que existe una cronicidad del mismo, los ligamentos de esa articulación se estiran demasiado, lo que puede dar lugar a un desgarro de los mismos. El desgarro puede ser de diversa gravedad, pudiendo llegar incluso a producirse una rotura total del ligamento.

Síntomas y tratamiento inicial

Los síntomas iniciales de un esguince de tobillo son:

• Dolor y sensibilidad
• Inflamación, hinchazón
• Hematoma
• Incapacidad para caminar o estar de pie sobre la articulación
• Rigidez de las articulaciones

 

Tratamientos

Hay dos forma de enfocar el tratamiento frente a una esguince de tobillo. Uno de estos tratamientos iniciales  es conocida como RICE, por sus siglas en inglés, que incluye:

1 – Descanso (“Rest”): Descansar y proteger la zona lesionada hasta recibir  Se pueden usar muletas para evitar que el peso sobre el tobillo cause dolor al caminar.

2 – Hielo (“Ice”): Aplicar hielo o algo congela sobre la lesión. El frío ayudará a reducir la hinchazón y el dolor. Esto debe hacerse tan pronto como sea posible, durante un mínimo de 20 minutos, tres veces al día.

3 – Compresión (“Compression”): Comprimir la zona lesionada mediante la aplicación de un vendaje ajustado. Esto disminuirá la hinchazón de la región lesionada. El vendaje no debe causar entumecimiento, hormigueo o aumento del dolor.

4 – Elevación (“Elevation”): Elevar la zona lesionada por encima del nivel del corazón tanto como sea posible para reducir la inflamación.

Sin embargo, con este tratamiento inicial hay que tener mucho cuidado con lo que se refiere al descanso, ya que no mover el tobillo durante mucho tiempo produce una pérdida significativa de la fuerza muscular, la amplitud de movimiento y de las funciones de la articulación, tal y como aseguran mucho profesionales de la medicina deportiva. Para evitar este problema, cada vez son más los profesionales que abogan por la técnica denominada POLICE (por sus siglas en inglés), que incluye protección (“Protection”), carga óptima (“Optimum Loading”), hielo (“Ice”), compresión (“Compression”) y elevación (“Elevation”).

La protección mediante un vendaje compresivo se realiza inicialmente para proteger el tobillo. La carga óptima se aplica gradualmente para evitar la inmovilización a largo plazo.

Dependiendo de la gravedad del esguince es posible que el paciente tenga que depender de muletas durante un tiempo para ayudarse a caminar de forma que se disminuya la cantidad de peso que se coloca sobre el tobillo lesionado, ya que así descansan los ligamentos del tobillo, permitiendo que se curen. Las muletas también pueden aliviar el dolor que se experimenta al caminar sobre la pierna afectada.

Sin embargo, siguiendo el sistema POLICE, esto no implica que hay que tener el tobillo inmóvil. Dependiendo de la gravedad del esguince se pueden empezar a realizar ejercicios adecuados, que irán siendo cada vez más intensos a medida que se va curando la lesión, desde los primeros. Estos ejercicios deben ser supervisados por un fisioterapetua.

Ejercicios para el esguince de tobillo

Un programa estándar de ejercicios para el esguince de tobillo incluye:

1 – Ejercicios para el rango de movimiento:

Se trata de ejercicios suaves que ayudarán a aflojar el tobillo. Con frecuencia la articulación se vuelve rígida después de un esguince  por la falta de movimiento. Es importante recuperar el movimiento que se puede haber perdido durante el proceso de curación a fin de evitar lesiones en el futuro y, mejor aún, ayudar al tobillo a mantener el mayor rango de movimiento posible.

2 – Ejercicios isométricos para el tobillo:

Los ejercicios isométricos le permiten construir la fuerza alrededor de la articulación sin moverla contra ninguna resistencia. Con esto se gana fuerza sin sufrir dolor con el movimiento de la articulación.

3 – Ejercicios de resistencia:

 Los ejercicios de resistencia se realizan moviendo la articulación contra una carga en la dirección opuesta.. Estos ejercicios ayudan a fortalecer los músculos del tobillo para conseguir un apoyo adicional para la articulación.

4.- Ejercicios de Propiocepción – Equilibrio:

Se tratan de ejercicios para trabajar el equilibrio, y evitar que dicho esguince se convierta en repetitivo y crónico. Ejercicios en apoyo monopodal, sobre una pierna durante 15 segundos, después realizarlo con la otra pierna. Cerrando uno de los ojo. Después podemos modificar los ejercicios y aumentar su dificultad.

En PHYSICALMED, contamos con fisioterapeutas especializados en recuperación deportiva que pueden ayudarte a tratar un esguince de tobillo.

Nuestro Centro de Fisioterapia se encuentra en la zona de Arturo Soria – Campo de las Naciones. Para cualquier consulta nos puedes escribir a info@physicalmed.es o llamarnos al 917596779.