Aquí está el segundo post de esta serie especial, más personal, en el que hablamos del puerperio o los cuidados en el postparto inmediato desde la experiencia propia.

Como fisioterapeuta que trabaja  con mujeres embarazadas y  en los cuidados en el postparto, le doy mucha importancia al cuidado perineal y postural en estos dos momentos especialmente frágiles para nosotras.

Hoy me voy a centrar en el cuidado del suelo pélvico en los cuidados en el postparto.  Qué fue lo que me sirvió a mí personalmente para paliar las molestias y a qué debemos prestar especialmente atención ya que con la llegada del bebé, todo gira en torno a él y nos podemos descuidar nosotras…

Hay que ir adaptándose poco a poco a la nueva situación y descansar todo lo que se pueda a ratitos cuando el bebé duerme.  En esos ratitos, en mi caso cortos por que Mario ha sido poco dormilón desde el inicio, hay que empezar a recordar todo lo que nos habían enseñado en la preparación al parto.

Lo primero es tener cuidado con nuestra postura, que sea siempre en la medida de lo posible lo más correcta cuando estés tumbada, de pie llevando al bebé en brazos, sentada y sobretodo dando las tomas porque pasamos muchas horas al principio. A mí lo que más me costó fue esto último, porque priorizaba que Mario se agarrara bien (ya os conté que el inicio de la lactancia fue un poco difícil) y tenía que hacer un esfuerzo por recolocarme bien, usar almohadones o cojines y evitar compensar con mis brazos, cuello o zona lumbar. Yo no he tenido dolores de espalda,  pero es de lo más frecuente que vemos en la consulta tras el parto.

Cuidados en el postparto

Además hay una estrecha relación entre nuestra postura y el suelo pélvico, sobretodo en estos momentos en los que la musculatura del abdomen y del periné han sido sometidos a una situación de máxima tensión.  Debemos colocarnos siempre bien, manteniendo el enderezamiento de la columna en lo posible, evitando los esfuerzos que hagan que el abdomen se abombe y se transmitan mal las fuerzas al periné muy debilitado y dolorido a menudo. ¡Atención  a como nos levantamos de la cama o al ir al baño! Es muy frecuente en ese momento hacernos daño, empujando sin soltar el aire… Yo me compré un taburete para ir al baño teniendo una posición correcta y me ayudó mucho junto con la respiración (profundizaremos en el tema más adelante).

Lo segundo en cuanto a los cuidados en el postparto, con lo que debemos ser muy cuidadosas es con la higiene de la zona genital, sobre todo si hemos tenido una episiotomía o desgarro.  Hay que evitar posibles infecciones e intentar favorecer la cicatrización del tejido.

Debemos realizar unos cuidados específicos de la herida que nos pautaran al darnos el alta en el hospital. En mi caso además de compresas frías en la zona del periné por un hematoma, debía realizar los lavados con el jabón Epixelle.  Hay que mantener la zona de los puntos lo más seca posible…pero con todo el sangrado que se sufre la primera semana, resulta muy difícil. Yo intentaba cambiarme de compresa muy a menudo y utilizaba el secador de pelo después de la ducha para secar bien la zona con el aire. En cuanto podía me tumbaba en la cama y descubría la zona inferior para dejar los puntos “al aire”, aunque con el bebé no pude hacerlo todo lo que me hubiera gustado.

Una vez los puntos se cayeron, comencé muy suave por la zona cercana a la cicatriz a realizar masajes después de la ducha con el aceite que había usado durante el embarazo para el masaje perineal.  Y posteriormente sobre la cicatriz cuando estuvo completamente cerrada.

Os muestro en la foto los 2 productos:

Cuidados en el postparto

Lo tercero,  hay que evitar los esfuerzos y empujes.  Es muy importante durante los primeros meses tras el parto tener mucho cuidado con las fuerzas que ejercemos sobre nuestra zona perineal que está muy debilitada y distendida.  Deben estar prohibidas las maniobras de valsalva, en las aguantamos el aire y apretamos (muy común cuando se tiene estreñimiento y no nos han enseñado la forma correcta de poder ir al baño).   Aquí os muestro en esta  foto de cuál es la forma correcta y cómo podemos ayudarnos de un pequeño taburete, además de soltar el aire por la boca.

Cuidados en el postpartoComo nos movemos poco esas primeras semanas y la aprehensión que se añade pensando que nos vamos a hacer daño al ir al baño…hay que ayudarse mucho de la dieta. Yo intenté comer mucha fibra y beber bastante agua.

Evitar los ejercicios y posturas en las que doblamos el tronco “abdominales tipo crunch”,  tener cuidado a cómo debemos agacharnos o coger pesos… etc.

 

El cuarto punto, que a mí me sirvió para este periodo fue el uso del cinturón pélvico para estabilizar la pelvis. No confundir con las fajas abdominales tradicionales, que debilitan aún más la musculatura.

Como ocurría durante el embarazo, por efecto de la hormona relaxina que ayuda a flexibilizar las articulaciones a fin de favorecer el parto, la pelvis mantiene cierta inestabilidad en el posparto.

Nuestra pelvis laxa unida al suelo pélvico debilitado en el posparto pueden poner en riesgo la estabilidad de los órganos internos (vejiga, uretra, útero, vagina y recto)  suponiendo un factor de riesgo para la aparición de prolapsos (descenso de alguno de dichos órganos).

Así que tenemos que prevenir. Para protegernos en este período, además de descansar, evitar esfuerzos y empujes como hemos dicho anteriormente, es recomendable utilizar la faja de estabilización pélvica o cinturón pélvico que va a dar soporte externo a la pelvis ( hace fuerza de cierre) y favorece la vuelta a la normalidad de los ligamentos y articulaciones.

Yo estuve usándolo durante las 5 primeras semanas tras el parto a ratos prolongados, porque no tenía dolor…pero en caso de dolor lumbo-pélvico se puede usar durante todo el día e incluso por la noche durante los primeros 2-3 meses tras el parto.

Cuidados en el postpartoComo veis en la foto  se trata de un cinturón ancho que se coloca alrededor de las caderas y pasa por el  final de nuestra columna (el sacro) y  no se trata de una faja que cubre todo el abdomen.

Por último el quinto punto a tener en cuenta, es comenzar a ejercitar el suelo pélvico.

Prácticamente desde el  primer día puedes ir intentando contraer de manera suave los músculos del periné, incluso como hemos dicho antes, con los puntos. Esto va a favorecer la recuperación de la zona con el bombeo sanguíneo que van a provocar las contracciones, mejora la cicatrización y ayuda a la reabsorción del edema.

Son los famosos ejercicios de Kegel que deberíamos haber aprendido y practicado durante el embarazo. Si los hemos realizado con anterioridad nos resultará más fácil identificar bien los músculos y sabrás contraerla correctamente, ya que la zona estará entumecida por el trabajo del parto.

Cuidados en el postparto

Es normal tener los primeros días sensación de urgencia miccional o incontinencia de esfuerzo que si no desaparece por completo en 2- 3 semanas, mi consejo es que acudas a un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico para poner pronto tratamiento.

Mi problema fue a parte de la debilidad de la musculatura perineal, dolor en la cicatriz de le episiotomía al tacto y adherencias, sensación de tirantez.  Uno de los motivos más frecuentes de consultas de  cuidados en el postparto es éste, dolor en la zona que puede derivar en vaginismo.  Así que me puse en manos de mi compañera Lourdes Peña (Physicalmed) y de la maravillosa diatermia (Indiba) que funciona fenomenal para estos casos.

Cuidados en el postparto

En resumen, el postparto es un momento muy delicado para nosotras tanto físicamente como emocionalmente pero no debemos olvidar que tenemos que cuidarnos y prevenir futuras complicaciones.

Ponte en buenas manos, expertas en cuidados en el postparto y deja que te ayudemos a sobrellevarlo lo mejor posible. En Clínica PHYSICALMED  contamos con fisioterapeutas especializados en la atención a la mujer y en cuidados en el postparto.

Puedes consultarnos en info@physicalmed.es o en el teléfono 917596779. (Zona Conde Orgaz – Campo de las Naciones – Arturo Soria – Canillas – Hortaleza).

Comentarios

También te podría interesar